Estados Unidos volvió a ser escenario de una matanza en una institución educativa, la segunda más numerosa de su historia. La escuela Marjory Stoneman Douglas High School de Parkland, al sur de Florida fue el lugar elegido por Nikolas Cruz, un exalumno que tomó una brutal decisión: ir al lugar armado y dispararle a cualquiera que se le cruzara en su camino. Hay al menos 17 muertos y 20 heridos.
Cuando Cruz comenzó a disparar, las clases fueron interrumpidas. Los chicos se escondieron debajo de los pupitres y muchos de ellos se escondieron en los armarios.