Al menos 21 personas murieron en un intento de fuga masiva en una prisión de la ciudad de Belém, en el norte de Brasil, luego de un brutal tiroteo entre los presos y los guardiacárceles que lo impidieron.
Un grupo de internos trataba de huir con apoyo de hombres armados afuera de la cárcel.
El secretario de seguridad expresó: «En ese momento se desató un intenso intercambio de tiros entre el equipo que realizaba el intento de rescate en apoyo externo, parte de los custodiados y el equipo del Batallón Penitenciario»
Está confirmada la muerte de otras 21 personas, entre presos e integrantes del grupo criminal de rescate que aún deben ser identificados, y un oficial. Otros cinco agentes de seguridad resultaron heridos, uno de ellos en estado grave.
Los presos también estaban armados, sin dar detalles de cómo pudieron ingresar armas.