A tan solo nueve días de la votación del aborto legal en el Senado saca ventaja el rechazo, tras el anuncio del radical Juan Carlos Marino de su posición en contra del proyecto. Por el momento son los 35 senadores se opondrían a la habilitación de la interrupción del embarazo, de un total de 72.

Hasta ahora quedan cinco legisladores indecisos, que tienen la llave para definir si la iniciativa se convierte o no en ley o si vuelve con cambios a Diputados, que le dio media sanción el mes pasado.

El martes será el último día de exposiciones en el Congreso a favor y en contra del proyecto ante las comisiones de Salud, de Justicia y Asuntos Penales y de Asuntos Constitucionales. Un día después se firmará el dictamen, de cara a la votación en la Cámara alta, el próximo 8 de agosto.

La reunión del miércoles será clave, ya que para que un dictamen sea de mayoría debe reunir la mayor cantidad de firmas en cada una de las comisiones. Será este el que tenga prioridad a la hora de votarse en el recinto, caso contrario el de primera minoría, cuando ninguno obtiene la mitad más una de las firmas en cada comisión. Lo cierto es que los legisladores que se oponen son mayoría en dos de las tres comisiones en la que se debate el proyecto, excepto en Salud, que es cabecera del debate.

En caso de empate a la hora de la votación definirá la titular de la Cámara alta, la vicepresidenta Gabriela Michetti, de conocida postura en contra del proyecto, y que ya anticipó que en ese caso rechazará la iniciativa.