Presidido por José Funes, el Honorable Concejo Deliberante aprobó el cambio de autoridades del Concejo de Arbolado Público ; más tarde y fundado en argumentos se declaró patrimonio a histórica bodega, y elevó el proyecto de declaración de ciudadano ilustre post mortem a José Antonio Sastriques.
Por expediente 5531-O-2020 bajo registro de coordinador de Medio Ambiente y Arbolado Público , se elevó la nota para aprobación de cambio de autoridades del Concejo de Arbolado Público con competencia en el departamento, creado por Ordenanza Municipal N°5455-2019.
El Honorable Concejo Deliberante de Pocito resolvió en forma unánime declarar de interés histórico, patrimonial, cultural y arquitectónico del departamento Pocito a la Bodega Viñas de Segisa. El proyecto ingresó como expediente 6084-P-2020 registrado por el bloque de concejales del Frente Todos, constituido por los concejales Silvina Cosentino, Ricardo Julio,Yanina Agüero, Mario Gaitán y Antonio Fernandez.
Por otra parte el honorable cuerpo en forma unánime declaró como vecino ilustre post mortem al Señor José Antonio Sastriques . El proyecto ingresó como expediente 6024-P-2020, registrado por las concejales Laura Palma y Belén Barboza.
APOSTILLA: Acontinuación «Homenaje a un pionero de Rinconada» publicada por Unión Vecinal de Rinconada en Diario de Cuyo 16/01/2020
El pasado 10 de mayo de 2019 fue recordado el 100º aniversario del natalicio de Don José Antonio Sastriques y esta Unión Vecinal no ha querido dejar pasar este acontecimiento sin reconocer la labor de este pionero de Rinconada, quien además fue el primer presidente de la entidad.
En un apretado resumen de su trayectoria señalaremos que nació en Pocito y que concurrió a la escuela 129 ubicada en calle 15, entre Aberastain y Mendoza, donde fue un alumno aventajado especialmente en matemática.
Su padre, inmigrante español, fue contratista de finca. José era el menor de 4 hermanos y de niño le ayudaba a su madre a vender verduras en una carretela, por lo que ya se vislumbraban sus dotes de comerciante.
De muy joven aprendió el oficio de panadero, rubro que fue la gran pasión de toda su vida. Con el tiempo con gran esfuerzo logró adquirir la esquina de calle Aberastain y 14. A posterior y gracias a un préstamo bancario construyó lo que se convertiría en un supermercado, tienda, zapatería y bazar. Tuvo además fábrica de soda, de helados, de pastas, confitería y servicio de lunch entre otros. El edificio fue inaugurado en 1955.
Su esposa fue un puntal fundamental en su vida ya que lo acompañaba en toda su actividad comercial sin descuidar las tareas del hogar.
Si bien fue fructífera e intensa su actividad comercial, también lo fue su proyección en la comunidad. Fue durante años presidente de la Cooperadora de la Escuela José R. Rojo. Fue el primer presidente de la vecinal de Rinconada, creada el 22 de agosto de 1965 con la finalidad de proveer agua potable a los vecinos de la zona. Pero desde esta entidad también se encargó de gestionar la obtención del gas domiciliario, el alumbrado público, la pavimentación de calle 14 y aledañas y la realización de una nueva planta potabilizadora en «El Abanico» .
También aportó los ladrillos y viguetas necesarias para la construcción del Centro Materno Infantil de Rinconada inaugurado en 1982 y colaboró en la construcción de la capilla del Sagrado Corazón de Jesús (hoy iglesia).
En 1992 recibió una distinción por su paso como presidente y colaborador del Club Atenas Pocito y fue socio fundador de la Caja de Crédito Pocito, en 1965. Luego con un grupo de amigos fundó el Rotary Club Pocito el 2 de julio 1969. En un acto realizado en el Club Sirio Libanés, recibió la más alta distinción que otorga el Rotary en la provincia, «El Probus al Mérito» por su constante servicio a la comunidad, consistiendo en una estatuilla de Domingo F. Sarmiento.
Fue elegido constituyente y ocupó el cargo de concejal Ad Honorem del Concejo Deliberante de Pocito entre los años 1952 y 1955, rechazando con posterioridad la jubilación de privilegio a la que podía acceder ya que la consideraba inmoral. En tanto él cobraba una jubilación mínima.
A poco de su fallecimiento, con 92 años apadrinaba un jardín de infantes de la Escuela José R. Rojo.
Fueron esos niños y otros alumnos del establecimiento quienes lo despidieron el día de su muerte, haciendo flamear sus pañuelos.
Por Comisión Directiva de la
Unión Vecinal de Rinconada
