El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, aseguró que no había cambiado su opinión de que el presidente chino, Xi Jinping, era efectivamente un dictador, después de la cumbre que mantuvo con aquel.
La agencia de noticias Reuters interpretó que ese comentario «probablemente aterrizará con un ruido sordo en Pekín».
Biden celebró una conferencia de prensa en solitario después de cuatro horas de conversaciones con Xi en las afueras de San Francisco.
Al final de la conferencia de prensa, le preguntaron si todavía creía que Xi era un dictador, algo que había afirmado en junio y que provocó un revuelo.
«Mire, lo es. Es un dictador en el sentido de que es un tipo que dirige un país que es comunista y se basa en una forma de gobierno totalmente diferente a la nuestra», contestó Biden.